Eldars Oscuros

Introducción

Ésta es una historia sobre el mal hecho carne. Así empieza el primer capítulo del Codex Eldars Oscuros y no hay mayor verdad, ya que los Eldars Oscuros son la personificación de la crueldad y malevolencia de la galaxia. El suyo es un mundo de terror en su estado puro; un reino que no existe en el plano material, sino en un no espacio sellado por el tiempo y otras influencias mundanas. Es aquí donde habitan, listos para saltar al espacio real y hacerse con todo lo que consideran suyo. Para los Eldars Oscuros, los demás seres vivos no son otra cosa que pusilánimes presas; ven a los soldados del Imperio y a las demás razas como sus rebaños, para recolectarlos a su antojo cuando sea necesario. De todas las miríadas de enemigos del 41º Milenio, son a los Eldars Oscuros a los que más debes temer. Mientras que otros te mutilan o aniquilan, los Eldars Oscuros te quieren vivo. Tomarte como esclavo y llevarte a la Ciudad Siniestra es un destino peor que los infiernos vivientes del Caos, ya que la tortura no se hace para un fin, sino que es un malvado y sádico arte que los artesanos han estado practicando durante miles de años.


Los Eldars Oscuros provienen de Commorragh, la úlcera oscura que hay en el corazón de la telaraña y el puerto desde el que lanzan sus incrusiones contra el espacio real. El propósito de estas incursiones es capturar esclavos, cuyos poderes alimentan a la Ciudad Siniestra y rejuvenece a los mismísimos Eldars Oscuros, alargando sus vidas aún más.


Ser uno de los miembros que constituyen una incursión es un privilegio y un honor, y sólo la elite de la sociedad de los Eldars Oscuros se embarca en tal conquista. Los Eldars Oscuros tienen una letal diversidad de guerreros, equipo y armas a su disposición. Sobre el campo de batalla, los Eldars Oscuros atacan de manera letal y rápida, utilizando sus elegantes naves Incursores para atacar al enemigo incluso antes de que estos se enteren de que están siendo atacados. Además, las ágiles Brujas o los crueles Guerreros de la Cábala utilizan los Incursores para sus ataques. Más rápidas que los Incursores son las estridentes motocicletas de los Guadañas, que utilizan sus monturas como armas, y sus aletas puntiagudas montadas en el chasis decapitan a los adversarios a su paso. Aullando y gritando por los cielos también se ven a los Infernales, que descienden a toda velocidad montados en aeropatines con sus espadones infernales a mano y que vuelven a ascender con su presa para esconderse de nuevo en la oscuridad. Desde las sombras de sus víctimas, emergen los Mandrágoras, seres medio demonios que son temidos incluso por otros Eldars Oscuros.

Habitantes de la Ciudad Siniestra

Los Eldars Oscuros se ven a sí mismos como los verdaderos herederos de la raza Eldar después de la Caída. Aunque sus hermanos más débiles escaparon del imperio hacia los Mundos Vírgenes que se extienden por la galaxia o hacia los mundos astronave, aquellos que decidieron quedarse, y que se convertirían en los Eldars Oscuros, acabaron rodeados y ocultos en los sub-reinos de la telaraña, lo que les permitió salir ilesos físicamente del apocalíptico nacimiento del Dios del Caos Slaanesh.

Aunque su poder físico puede haberse atrofiado, los Eldars Oscuros se ven a sí mismos más cerca de los Eldars Antiguos que aquellos que habitan en los supervivientes mundos astronave. Mientras que los Eldars de los mundos astronave han desarrollado un sístema rígido de sendas para evitar los deseos lascivos ocultos en todas las almas eldars, los Eldars Oscuros han dejado salir esas ambiciones y antojos. Los Eldars Oscuros son guerreros y asesinos, mientras que un nativo de un mundo astronave (a menos que sea un Guerrero de la Senda) sólo se pondrá una armadura y llevará armas como último recurso.



La presa de Commorragh
Para poder evitar la constante amenaza de Slaanesh y poder rejuvenecer sus almas, los Eldars Oscuros necesitan alimentarse del sufrimiento ajeno, ya sea en el fragor de la batalla o en sus ratos libres en la Ciudad Siniestra. Es necesario un constante abastecimiento de sufrimiento y dolor para impulsar la ciudad y rejuvenecer a los habitantes, pero también es muy útil como materia prima para los Hemónculos. Es por eso, que la moneda de Commorragh es la energía vital de los esclavos.

Para reunir los muchos miles de esclavos necesarios para hacer girar las ruedas de Commorragh, los Eldars Oscuros cruzan el vacío hacia el espacio real. Utilizan los pasos de la telaraña para realizar rápidas incursiones en cualquier parte de la galaxia, el objetivo de las cuales es recoger más suministros para los hambrientos habitantes de la Ciudad Siniestra.


Los Eldars Oscuros sobresalen en este tipo de operaciones. Su estilo de combate y su armamento está diseñado para atacar, eliminar al enemigo y desaparecer antes de que los refuerzos o la ayuda potencial sean conscientes de la llegada de los Eldars Oscuros. Las fuerzas de asalto, a pesar de estar formadas por asesinos traidores y muy esquemáticos, funcionan como máquinas bien dispuestas sobre el campo de batalla. Los Arcontes y Súcubos que lideran las incursiones las programan meticulosamente. Para cada una de las incursiones al espacio real, se reclutan a los más hábiles, pero sólo trabajando en equipo podrán repartir la mayor cantidad de sufrimiento y cosechar al mayor número de esclavos. Cuando vuelven a Commorragh, y las almas frescas están a buen recaudo, las maquinaciones continuarán con las habituales consecuencias violentas.


Poder del dolor
Como ejército, los Eldars Oscuros son una herramienta delicada; no son fuertes, ni particularmente resistentes. Les falta la tenacidad y durabilidad de los Marines Espaciales y no son capaces de reunir un ejército tan numeroso como los Tiránidos u Orkos. Sin embargo, aunque otras razas pueden considerarse buenas en ataque, no son nada comparadas con la letal belleza y la eficacia implacable de los Eldars Oscuros. Estos se deleitan con ataques agresivos y realmente rápidos, pero realizar un ataque fuerte no es su única estrategia. Los habitantes de la Ciudad Siniestra disponen de una potencia de fuego apabullante, entre la que se encuentran sus letales armas cristalinas, que no sólo están diseñadas para inhabilitar al adversario, sino para causar tanto dolor como sea posible.



A diferencia de la mayoría de ejércitos, que se van debilitando a lo largo de la batalla cuando el desgaste hace su aparición, los Eldars Oscuros aumentan su poder cuanto más dure la violencia. Conforme las fuerzas de Eldars Oscuros van eliminando las escuadras enemigas, cogen cada vez más energía vital de sus víctimas. Esta energía recorre sus cuerpos, y les confieren nuevas habilidades. Por eso, cuando una escuadra de Eldars Oscuros elimina a una unidad enemiga, obtienen un marcador de dolor que les otorga una habilidad adicional. Los marcadores de dolor son acumulativos, por lo que cuantas más unidades enemigas aniquile una escuadra de Eldars Oscuros, más habilidades obtendrán.

Éste es un rasgo único de los ejércitos de Eldars Oscuros, por lo que tus escuadras se harán más fuertes y letales cuanto más dure la batalla.

Las Cábalas
En el corazón de los ejércitos de Eldars Oscuros y su retorcida sociedad se encuentran las Cábalas. Después de que las casas nobles de Commorragh cayeran a manos de Asdrubal Vect, las Cábalas llenaron el vacío de poder. Ahora, dominan la mayoría de aspectos de la sociedad de los Eldars Oscuros con la propia Cábala de Vect, el Corazón Negro, que se sitúa en la parte más alta de esta estructura de poder.


Los ejércitos de Eldars Oscuros suelen tener escuadras de Guerreros de la Cábala como núcleo de la fuerza. Equipados con rifles cristalinos y una armadura de la Cábala, pueden enfrentarse a cualquier otra unidad de infantería enemiga, y su desprecio por incluso los adversarios más poderosos hace que no debas infravalorarlos.

Los Cultos de Brujas
Los Cultos de Brujas de Commorragh están en segundo lugar en prestigio, después de las Cábalas. Los Eldars Oscuros prosperan mediante excesivas exhibiciones de masacre y en el arte del asesinato no hay nadie mejor que las Brujas. En Commorragh, las Brujas residen en las enormes arenas de muerte, combatiendo con todo tipo de bestias exóticas de la galaxia. Por eso, no es de extrañar que estas guerreras tan expertas tengan un lugar en todas las incursiones al espacio real.

Las Cábalas confían tanto en la habilidad de los Cultos de Brujas para capturar almas y causar estragos en los mortales menores que les permiten liderar las incursiones. A la cabeza, siempre hay un Súcubo. Se trata de seres con una apariencia encantadora, aunque es una belleza fría y dura, una forma que esconde un asesino y comandante sádico y calculador.


Los Cónclaves de Hemónculos
En las oscuras entrañas de Commorragh, habitan los pervertidos escultores de la carne, maestros de la tortura y coleccionistas del dolor de los Eldars Oscuros. Los cónclaves de Hemónculos resultan fundamentales para la supervivencia de la sociedad Commorrita debido a su maestría en las prácticas regenerativas. Los Hemónculos están especializados en las alteraciones corporales, y se deleitan en poder poner sus garras sobre sujetos nuevos y frescos. Es por ello que dejan sus temibles laboratorios y marchan al campo de batalla, aunque raramente van solos. Cuando forman parte de una fuerza de Eldars Oscuros, los Hemónculos irán acompañados por todo tipo de viles ayudantes, desde aberrantes Atormentados, esculturas desfiguradas de sus maestros más venerados, hasta enormes Grotescos, creaciones demenciales de carne formadas por todo tipo de desafortunados y partes del cuerpo.

Incursores del espacio real

Los Eldars Oscuros son una raza llena de asesinos y traidores de sangre fría, que pisotearán, encantados, los cuerpos de sus compañeros para obtener prestigio y poder. Sin embargo, sus maquinaciones se verán temporalmente detenidas cuando invaden el espacio real a la búsqueda de la energía vital que tanto desean y que obtienen del deolor de los mortales menores. Los Eldars Oscuros dejan a un lado sus ambiciones y trabajarán en grupo para llevar a cabo una gran masacre y llevarse cautivas a sus presas.


Este tipo de fuerza está compuesta por muchos elementos de muchos niveles de la sociedad Comorrita. Echemos un vistazo a algunas de las tropas más letales bajo el control de un Arconte.

Guerreros de la Cábala
El núcleo del ejército de Eldars Oscuros está compuesto por escuadras de Guerreros de la Cábala. Equipados con rifles cristalinos, que pueden herir a cualquier enemigo que no sea un vehículo con un resultado de 4+, independientemente de la resistencia de su víctima, estos letales guerreros pueden descargar una aplastante andanada de fuego. También tienen acceso a armamento más exótico, como las armas de luz negra, perfectas para hacer trizas el blindaje de los vehículos de otras razas insignificantes.

Brujas
Las Brujas son asesinos consumados en el combate cuerpo a cuerpo. Tienen acceso a todo tipo de armamento exótico y completamente letal, pero pueden aniquilar a cualquier Marine Espacial con una simple espada, gracias a su gran habilidad en el asesinato. Van ligeramente equipados, por lo que son susceptibles al fuego enemigo, pero una vez en combate, su regla Esquivar +4 (una tirada de salvación invulnerable realmente eficaz) y su habilidad inigualable en ataque, el resultado está claro.

Íncubos
Los Íncubos son los guerreros de elite y de más alto calibre del ejército de Eldars Oscuros. Estos silenciosos guerreros se concentran sólo en aniquilar al enemigo de la manera más eficaz posible. Su punto fuerte reside en el ataque, aunque, a diferencia de las Brujas, son mejores en esquivar el fuego enemigo de largo alcance. En combate cuerpo a cuerpo, sus letales espadones son las estrellas del espectáculo, armas de energía enormes que proporcionan a los Íncubos un +1 a la Fuerza.

Mandrágoras
Los Mandrágoras, acechantes sobrenaturales cuyos orígenes son un misterio, son criaturas terroríficas que pueden emergir de una sombra enemiga. En combate, los Mandrágoras tienen las reglas especiales Infiltración y Sigilo, lo que les permite atacar sin previo aviso y hacerlos especialmente difíciles de mover cuando se ponen a cubierto. Además de tener 2 Ataques y Fuerza y Resistencia 4, cuando obtienen su primer marcador de dolor, los Mandrágoras también tienen el letal ataque de un Rayo castigador a largo alcance.

Guadañas
Los Guadañas son adictos a la velocidad y utilizan sus motocicletas perversamente puntiagudas para volar por las espinas de Commorragh o a través de los campos de batalla del espacio real a velocidades suicidas. La máxima euforia para un Guadaña es provocar una muerte elegante desde la parte posterior de sus metálicas monturas sin aminorar la marcha. Las motocicletas Guadaña son tan increíblemente rápidas que pueden mover hasta 90cm cuando utiliza sus turbopropulsores. Esto les permite dirigirse hacia el enemigo desde el inicio del combate, realizando ataques mortíferos con las cuchillas veleta de sus motocicletas, o incluso dispersando racimos de abrojos mientras vuelan sobre sus presas.

Infernales
Otro grupo de asesinos aéreos son los Infernales. Desde los peldaños inferiores de la sociedad Commorrita, acompañan a las incursiones al espacio real para demostrar su entereza. Sobre aeropatines, se lanzan contra el centro del ejército enemigo gritando maldiciones, insultos y, con indiferencia, desgarran los miembros del adversario. Los Infernales son otra de las muchas opciones de Ataque rápido de los Eldars Oscuros. Son infantería retropropulsada, equipada con cápsulas cristalinas (armas envenenadas de Asalto 2 que siempre hieren con un resultado de 4+) y espadones infernales, que les proporciona un ataque adicional y un +1 a la Fuerza.